Griferías en lavabos o cocinas

Grifería

A la hora de elegir un grifo lo primero que se tiene que tener en cuenta es el uso que se le va a dar y donde se va a colocar el grifo.

La grifería se puede instalar en la pared o en la encimera, con lo que la instalación es diferente y los tipos de conectores también lo son.

La altura del mando, los colores a utilizar (si quieres huir de los tonos plateados), los acabados brillantes o mates y las prestaciones que ofrecen harán que te encuentres con una gran variedad de modelos. 

[Grifería 1]

Tipos de grifos.

Entre los modelos de grifería de gama doméstica podemos encontrar:

Grifos monomando

Con una sola maneta podemos regular la salida de agua fría o caliente. Son muy fáciles de instalar y suelen ser bastante económicos.

Grifos bimando

Son los que presenta dos mandos, uno para el agua fría y otro para el agua caliente. Ya no son tan demandados, aunque históricamente hayan sido los más utilizados.

Grifos de caño bajo

Son los que disponen de unos pocos centímetros de espacio para la salida de agua. Dado el tamaño casi estándar, son los grifos que se instalan directamente en el lavabo.

 

Grifos de caño alto

Estos grifos cuentan con un tamaño mayor, tanto de altitud del tamaño de grifo, como de longitud del caño del agua. Son un modelo de grifos diseñados para lavabos de mayores dimensiones y también para su ubicación sobre repisa o mueble.

Grifos abatibles

Tienen la posibilidad de girar toda la estructura del grifo. Esto permitirá liberar la zona de lavabo para otra actividad, como puede ser por ejemplo, la colocación de un recipiente. Esta modalidad, aunque también se emplea en baños, es más propia de zonas de cocina que permiten mayor operabilidad en el manejo del agua, sobre todo para el lavado de ollas o cacerolas grandes.

Grifos extraibles

Algunos grifos pueden contar con un manguito o manguera extraíble desde la propia salida del agua (final del grifo). Cuentan con una manguera interior con topes en los extremos y que permite la fluida circulación del agua. De igual forma que los anteriores, son más habituales en los espacios de cocinas.