La ósmosis inversa mejora la calidad del agua

Osmosis

La ósmosis inversa puede eliminar muchos tipos de elementos suspendidos en el agua, incluyendo bacterias, y está utilizada tanto en procesos industriales como para la producción de agua potable.

Entre los modelos de ósmosis inversa doméstica podemos encontrar dos tipos de aparato:

    • Estándar: son los más básicos y, por tanto, suelen ser los más económicos. Se suelen colocar debajo del fregadero, dentro del armario, por lo que no son muy discretos.
    • Compacto: para los apartamentos pequeños o para los hogares donde se busque más discreción que con el estándar, el sistema compacto de ósmosis inversa es la mejor solución. 
  • Dimensión. Nuestro aparato tiene que estar correctamente dimensionado por eso debemos intentar comprar un equipo acorde con nuestras necesidades, algo que se mide por los litros por minuto. Por ejemplo, en ósmosis inversa doméstica 1,5 litros de agua por minuto es una cifra razonable, ya que se puede obtener esa cantidad las 24 horas de día.

  • Coste de mantenimiento. Los aparatos de ósmosis necesitan el cambio de filtros al menos una vez al año. Por ello, equipos de bajo coste de mantenimiento son una opción interesante a corto y a largo plazo.

  • Valor producción- rechazo. La ósmosis inversa suele incluir un proceso en el que el agua se divide en dos partes al atravesar una membrana: una potable y una de rechazo, que no es apta para el consumo. En este sentido, podemos escoger un producto ecológico que recicle ese agua.

  • Con o sin bomba. La bomba de agua es recomendable en el caso de vivir en un edificio con baja presión.